Ser más eficiente en el trabajo. Todos queremos ser más eficientes en general: nos gustaría aprovechar más el tiempo, dilatarlo para poder realizar todo lo que tenemos que hacer, querríamos poder llevar a cabo muchas más cosas en nuestro día a día.
No nos gusta sentir que perdemos las horas o que hay quehaceres o situaciones que nos absorben la energía y que hacen que nuestras horas se evaporen. Realmente, a nadie nos gusta aplazar tareas ni que se vayan acumulando en nuestro escritorio y, sin embargo, nos ocurre continuamente: ya sea porque una tarea no nos gusta demasiado, ya sea porque tenemos otras más urgentes… muchas veces no somos tan eficientes como realmente nos gustaría.
¿Por qué no somos tan eficientes como quisiéramos?
El mundo actual, nos pide una eficiencia y una rapidez continuas. Sin embargo, no siempre podemos cumplir con todas las expectativas -las de otros y las nuestras- y es precisamente por culpa de esta ansiedad, por querer hacer todo a la vez, por exigirnos más de lo debido, por creer que podemos con todo.
Debemos escuchar a nuestro cuerpo y a nuestra mente, organizarnos e ir cosa por cosa: sólo así seremos más eficientes. Curiosamente, cuanto más queremos hacer, menos hacemos. Es una enseñanza que se desprende de aquella de antaño, la de: «quien mucho abarca, poco aprieta»:
3 Consejos para ser más eficiente en tu trabajo
Por combatir todo ese estrés, la exigencia y la continua frustración que nos invade por no cumplir todas las expectativas, te traemos 3 Consejos para que puedas ser más eficiente en tu día a día y, especialmente, en el trabajo:
1. Haz un listado de tus objetivos
Es necesario que nos organicemos para tener una previsión de todo lo que tenemos que realizar. Lo mejor es que sea una planificación a corto plazo: al principio de cada semana reparte las tareas que realizarás cada día de dicha semana. Diariamente revísalas y añade o quita las que sean nuevas o si te han quedado pendientes del día anterior
Es necesario ser muy realista con estos propósitos, para ello debes conocerte y medirte en tus tareas. No se trata de ser esclavo de tu organización si no de que ésta te ayude a centrarte, lo que planifiques está a tu servicio, no te estreses si no cumples todo.
2. Céntrate en una única tarea
Las nuevas técnicas Mindfulnes nos enseñan a centrarnos en lo que estamos realizando en cada momento, la «atención plena» sólo así lo haremos en condiciones y, además, no acabaremos agotados.
De hecho, está demostrado que ir cambiando entre tareas absorbe entorno al 40% del tiempo productivo de una persona. La técnica pomodoro -de la que hablamos en este blog– nos enseña a centrarnos en sólo una tarea para ser más eficientes.
3. Haz pequeños descansos
Darte pequeños respiros ofrece tiempo a tu mente para desconectar de una tarea y concentrarse en otra. En estos descansos aprovecha para levantarte y estirar tu cuerpo, ya que permanecer mucho tiempo sentado no es bueno para tu circulación ni para tu espalda. Con 5 minutos es suficiente.
Igualmente, está demostrado que pasar más de 8 horas trabajando disminuye la productividad.
Así que, para ser más eficientes debemos, realmente, hacer lo contrario a eso que pensábamos y que llamamos multitarea: organizarnos, centrarnos en una cosa y descansar lo suficiente. ¿Qué os parece? ¿cumplís estos consejos?