¿Has pensado alguna vez en montar tu propia empresa? ¿Te ves como un futuro emprendedor de éxito? Si tienes clara una idea de negocio, pero no estás seguro de si es viable, es el momento de pasar a la acción. El primer paso es sencillo, pero, sin duda, es el más importante: debes hacer un análisis de la viabilidad técnica y económica de tu idea de negocio.
Para analizar si tu idea puede convertirse en un negocio rentable, puedes utilizar diferentes metodologías y someterla a diversos test de viabilidad. Una de las pruebas más sencillas que se emplean actualmente es la conocida «prueba del algodón». Se trata de un cuestionario de 27 preguntas que te ayudará a decidir si vale la pena invertir tiempo y dinero en tu idea de negocio o si es preferible que la descartes y pienses en otra cosa.
Este método de análisis de la viabilidad empresarial plantea una serie de preguntas a las que hay que responder con un sí o un no. Se trata de un test que incita a reflexionar sobre todos los aspectos claves de la idea de negocio: el producto o servicio que se va a comercializar, los potenciales clientes, la inversión necesaria e incluso el plan de marketing que se va a aplicar.
6 áreas de análisis para el éxito del negocio del futuro emprendedor
La «prueba del algodón» se basa en el análisis de 6 áreas del negocio que son claves para asegurar que de la idea puede llegar a alcanzar el éxito:
1. Análisis del capital humano: ¿tienes las cualidades y competencias necesarias para ser empresario? En este apartado se analiza la propia valía del futuro emprendedor con la finalidad de que reflexione sobre sus propias capacidades.
2. Análisis de la idea: en este epígrafe se incita a pensar sobre las posibilidades de mejora de la idea y su carácter innovador.
3. Análisis del producto: ¿qué ofrezco al mercado? ¿En qué me diferencio de la competencia? ¿Tengo capacidad de producción? Ahora se trata de concretar el producto y determinar si su fabricación y distribución son posibles y rentables.
4. Análisis del mercado: ¿es un segmento de mercado en auge o está ya saturado? En este apartado se piensa en el tamaño del mercado y sus características.
5. Análisis del cliente: ¿quiénes van a ser mis clientes?¿Dónde van a comprar mis productos o servicios? Es el momento de pensar en la demanda y los canales de distribución.
6. Análisis económico: ¿necesito una gran inversión?¿De dónde voy a obtener mis ingresos? Por último, hay que pensar en el dinero.
¿Qué te parece este análisis? ¡No lo pienses más y pon a prueba tu idea de negocio!