En invierno aumentan los catarros y gripes, enfermedades muy comunes que pueden asaltarte en cualquier momento. Quedarte en casa es la opción ideal, ya que te recuperarás antes y no contagiarás a nadie. En caso de ir así al trabajo, ten por seguro que rendirás menos. ¿De qué manera le dirías a tu jefe que no cuente contigo por encontrarte mal?
En Melior, aconsejamos empezar por una llamada
Si realmente te empiezas a sentir mal y notas que estás incubando una enfermedad, no dudes en llamar a tu trabajo. Por descontado, la antelación es esencial; así demostrarás que quieres causar el mínimo impacto y que eres una persona tan seria como responsable. Explícales cómo te sientes y, en caso de haber ido al médico, infórmales de lo que te ha dicho este profesional. Con esto les darás tiempo para buscar un sustituto y te mostrarás como una persona de confianza.
Concisión y credibilidad
Cuando llames no te pongas nervioso, procura hablar con sinceridad y sé conciso. Da la información necesaria sobre tu estado con claridad y sin irte por las ramas. Si es una enfermedad contagiosa, destaca esta circunstancia. También habla de tus síntomas y cuándo han empezado a manifestarse. Además, incide en que no serán muchos los días de baja y no exageres, ya que perderás credibilidad para el futuro.
Piensa a quién vas a dar el aviso en el business center
Para esto, no dudes en revisar las políticas al respecto de tu empresa, en el caso de que estas existan. Si indican que los avisos van directos a tu jefe, ya sabes a quién tienes que llamar. Sin embargo, en caso de no haber un protocolo establecido, informa a las personas que más van a verse afectadas por tu falta, al departamento de recursos humanos o, directamente, a tu superior.
En caso de necesitar aportar información, sobre todo si la enfermedad es grave, recurre al correo electrónico y aporta todo lo imprescindible. Además, no olvides agradecer la comprensión por tu situación y avisa antes de reincorporarte, lo cual siempre será en el menor tiempo posible. Cuidarse es esencial, pero también lo es no aprovecharse de según qué circunstancias.
Agradece la respuesta que te ofrezcan
Una vez reincorporado, agradece la comprensión que tu jefe o superior ha demostrado. Quizás pienses que son unas sencillas palabras, pero dirán mucho de ti. Asimismo, procura reincorporarte sin bajar el listón e infórmate de cómo está la situación de trabajo en esos momentos. La idea es volver como si nunca te hubieras ido.
De nada te sirve acudir a un centro de negocios enfermo. Recuerda avisar con tiempo y no aprovecharte de la situación.