Las cooperativas están teniendo una mayor fortaleza que las sociedades mercantiles en este entorno socio económico, así se han disuelto en junio 1.402 sociedades mercantiles, mientras que las cooperativas han tenido un crecimiento interanual del 14.3%.
Esta es una buena solución para mantener un proyecto de negocio y el empleo, ya que los trabajadores comprometidos con la corporación pasarían a ser cooperativistas. Antes de tomar esta decisión, la empresa debe evaluar en profundidad la situación del entorno, su volumen de trabajo y la estrategia que se podría seguir, sobre todo para conocer a fondo como afectaría este cambio a la empresa y que los cooperativistas conozcan las carencias y otros aspectos de la nueva entidad que surgiría con este cambio.
El compromiso y el liderazgo son dos valores fundamentales en este proyecto, por eso el empresario debe estar dispuesto a buscar alternativas que faciliten el proceso de transformación de una sociedad mercantil a una cooperativa.